TDAH es la sigla de trastorno por déficit de atención e hiperactividad (ADD Attention Deficit Disorder – sigla en inglés desde 1980 a 1987, AD/AH Attention Déficit Hyperactivity Disorder – sigla en inglés desde 1987).
Es un trastorno del desarrollo de base neurobiológica, que tiene su origen en la infancia, puede persistir en la edad adulta y va a impactar en diferentes áreas como la parte académica, social y la vida laboral de la persona (siendo adulto).
Se caracteriza por una pauta persistente de problemas relacionados con la desatención, hiperactividad e impulsividad, que se presentan con mayor intensidad y frecuencia de lo esperado para su edad y nivel de desarrollo, y que produce alteraciones en el nivel de desarrollo esperable del niño tanto en lo cognitivo, social y familiar. Se manifiesta con mayor claridad cuando los niños inician su experiencia educativa formal.
El TDAH (con o sin hiperactividad) constituye uno de los trastornos del desarrollo más importantes dentro de los problemas que afectan a los niños en sus relaciones con su entorno familiar, social y educativo.
La existencia de una única causa para el trastorno por déficit de atención e hiperactividad no ha sido determinada; pero se cuenta con evidencias sobre diferentes conexiones.
Se sabe que tiene un origen neurobiológico originado por factores ligados al desarrollo del sistema nervioso, alteraciones de la forma del sistema nervioso central (neuroanatómicas) y alteraciones respecto de cómo se transmite la información por las vías nerviosas (disfunción de los sistemas de neurotransmisión), altamente genético y al que se le atribuyen también la interacción de otros factores (ambientales y psicosociales) como los posibles facilitadores de este trastorno.
Hoy quiero presentarte tres cuentos que abordan brevemente, algunas de las características de los niños con TDAH y que además de servir como un recurso para sensibilizar sobre las experiencias que viven estos niños y sus familias y así empatizar con ellos, también sirven para exponer una de las alternativas de tratamiento que considero imprescindibles para un caso de éxito, la terapia.
TOPITO TERREMOTO
de Ana Llenas
Como todos los libros de su autora Anna Llenas, Topito terremoto también esta cargado de un mensaje profundo. Un libro que plasma la realidad de muchos niños con características del TDAH con o sin diagnóstico, niños que presentan dificultades en la escuela, en casa y con los amigos, niños etiquetados y expuestos a dificultades y críticas.
Pero también, este libro presenta una de las intervenciones oportunas para abordar estas experiencias: la terapia, obviamente para mi es maravilloso ver que un cuento infantil aborda esta alternativa de una forma natural, pues, aunque hemos avanzado mucho respecto al tema de la importancia de la salud mental y emocional, aun a veces parece que la terapia es un tema tabú.
Este bonito cuento además de sensibilizar sobre las dificultades, las alternativas y las experiencias de éxito y ayudarnos a empatizar con los niños con características del TDAH y sus familias, es un buen recurso para ayudar a nuestros niños a sentirse bien con ellos mismos recalcando una bonita frase que surge por ahí en las páginas del libro “A TI NO TE FALLA NADA, ERES MARAVILLOSO TAL Y COMO ERES”
LA PRINCESA SARA NO PARA
de Margarita del Mazo y José Fragoso
Este divertido cuento nos expone varios puntos importantes, por ejemplo, lo fácil que puede llegar a ser emitir y recibir un mal diagnóstico y por lo tanto terapias sin resultados efectivos (si, de nuevo mi ojo clínico me hace ver la expresión que hace sobre las terapias, lo cual me encanta).
Si bien, este cuento no nos habla claramente de otros factores importantes para poder decir que hablamos un caso de TDAH, nos hace referencia a algunas de las conductas y de las frases que escuchamos al respecto de nuestros niños con este diagnóstico, por ejemplo: “¡la princesa Sara no para!”
Me parece que es un bonito cuento para hablar del tema, para debatir al respecto y para sensibilizar sobre los sobrediagnósticos, las etiquetas, las dificultades en el ambiente familiar y social que podemos encontrar, así como las características de todos los niños, que podríamos esperar a ciertas edades.
LA NIÑA HURACAN Y EL NIÑO ESPONJA
de Ilan Brerman y Lucía Serrano
Un cuento además de divertido, sensible, frente a las diferencias de formas de ser de los niños y de las personas en general.
Si bien, dentro del personaje femenino parece que nos enlistan comportamientos típicos de niños con TDAH, de nuevo igual que el cuento anterior, no se habla de otros ambientes y otros factores importantes para poder determinar claramente un diagnóstico, sin embargo, la autora se ha preocupado por dejarnos un mensaje de lo maravilloso que es complementarnos con las diferencias de los demás.
Este cuento nos deja enseñanzas como el aprender de los demás, la amistad, nos plasma a unos protagonistas que al principio no encajan, como en la vida real, la importancia de no juzgar cuando encontramos a alguien que piensa y actúa distinto a nosotros y que estas diferencias entre las personas no nos alejan, sino que nos enriquecen, siempre y cuando les respetemos y aprendamos a conocerles.
Abordar este tema, es delicado, pues es tema que abre un gran debate sobre su existencia (a pesar de contar con evidencia científica al respecto), el post de hoy no pretende aclarar esto.
¡Espero esta selección de cuentos te guste! *»Si deseas adquirir algún libro por medio de los enlaces que encuentras, tu pagarás exactamente lo mismo y es posible que yo reciba una comisión por la mención; sin embargo, mi recomendación a estos materiales es genuina y son aquellos que personalmente consulto y utilizo en mi práctica profesional y personal. ¡Gracias!«
Como profesionistas debemos entender nuestros roles y respetar, debemos canalizar a especialistas en detección y diagnósticos. Una cosa es un niño inquieto y otra es un niño con el TDAH, por eso es necesaria la evaluación detallada de cada caso.
Es cierto que todos los niños son activos, impulsivos y sus tiempos de atención irán incrementando conforme vayan creciendo, sin embargo, un niño con TDAH tiene características particulares, su hiperactividad o falta de atención le dificultan ajustarse a las rutinas de la familia, seguir las normas de la casa, mantener amistades, interactuar de manera positiva con otros familiares, niños o adultos. Sus síntomas constituyen una dificultad real.
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